Nubes y claros
Fernando Álvarez Balbuena
Akrón & CSED
Madrid, 2016
Fernando Álvarez Balbuena entrega en Nubes y Claros un poemario de exquisita elegancia verbal y que destila una profunda sabiduría de la vida.
Imantado por la Belleza, el escritor asturiano se muestra artífice y dueño de sus ámbitos poéticos, de esos paisajes de palabras en los que nos lleva de la mano de su alma enamorada a recorrer los misterios del amor y el desamor, de la memoria y del olvido.
En la vida y en la palabra, qué duda podría caber, transitamos entre nubes y claros que nos escriben los alfabetos del sentido. ¿Por qué nos vamos, por qué nos quedamos, qué es el exilio y qué el apego, la amistad, el rechazo, el sentir dolorido?
La vida se le prende a Fernando Álvarez Balbuena en la pluma y se extiende generosa de sentidos en las páginas. La vida así paladeada y sentida, así expresada, nos llega precisa y melodiosa, romántica y estoica, sensitiva y frugal, mármol palpitante, como un secreto para nosotros solos, los que leemos, en talante de confesión, los versos de Fernando:
Mi secreto eres tú, Desconocida.
Somos extraños; si te evoco siento
No poder expresarte el pensamiento
De mi alma, a tu belleza sometida.
Soñar la soledad, solo escribir, pulsar las delicadas cuerdas de las penas, traer al presente los recuerdos, las emociones efímeras y eternas, el devenir, la fugacidad, los rescoldos de las brasas, los infinitos matices de la pasión amorosa... el poeta enfrenta los rigores del tiempo construyendo un nuevo espacio temporal en el que logra contener todo aquello que fluye, todo eso que se escapa. Queda ahí, en su movimiento indetenible, vibrando en la onda de los versos:
Agua clara discurre por mis venas
Desde aquel día que hasta a mí viniste,
La sangre que tenía ya no existe
Toda se fue mezclada con mis penas.
Soñar el amor, saber su fuego, traer al presente su pasado... El sentimiento amoroso, manantial del ser y elusiva prueba de la eternidad que aguarda, es sello de la poesía de Fernando, espejo de la sincera actitud de un alma que se sabe amante y amada, que reconoce cuando invisible desciende la lluvia de oro del amor y fiel la recoge y transmuta en versos de recuerdos vivos:
Y envueltos entre nubes de pasiones
Que son, al par, verdades e ilusiones
Soñamos nuestros fuegos compartidos.
Mientras tenemos juntas nuestras manos
Los dolores y el mal se hacen lejanos
En océanos de olvido sumergidos.
Soñar la esperanza. Sentirla a través de las palabras y comprender un destino de felicidad. Humildad del poeta ante el poder del lenguaje y los dones que este otorga a quienes, como Fernando Álvarez Balbuena, han hecho de la soledad y del amor palabras donde vive la esperanza.
Y cuando llegue el fin que nos espera
Afróntalo con ánimo y valor.
Si has vivido contento con tu vida
La muerte es el fracaso del dolor.
Fernando Álvarez Balbuena |